Antonio Ordóñez (Madrid, 1987) firma como AtOLOnia para reconectar con el mundo mágico de su infancia. Ato, para los amigos, fue un niño que pasaba horas frente a un cuaderno de espiral y hojas cuadriculadas, dibujando los personajes de sus cómics favoritos e inventando los suyos propios.

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Como un superhéroe, siempre llevó una doble vida. Por las mañanas estudiaba Empresariales y Marketing en la universidad; por las tardes, podía encontrársele bailando breaking en el metro, haciendo teatro en un grupo universitario o llenando cuadernos con graffiti. Su formación artística nunca pasó por academias: se construyó a base de estudio, exploración, práctica constante y una necesidad genuina de expresarse. El cómic regresó a su vida en 2015 como una forma natural de expresión, y desde entonces decidió abrazar plenamente la identidad de su alter ego, AtOLOnia.

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Esa trayectoria autodidacta, unida a su pasión por el dibujo y las historias, le permitió profesionalizarse en 2019 como ilustrador, sin renunciar a crear sus propias historias para niños. En el ámbito del álbum ilustrado ha autoeditado sus libros infantiles: Rexi aprende (2021) y Mi granito de arena(2020), y ha sido finalista en certámenes como Keycolors 2022 (competición internacional de álbum ilustrado) y el Concurso de la editorial Hola Monstruo 2023.

 

En 2025 publica su primera obra como autor e ilustrador: Las diminutas aventuras de Abril (Edebé), una serie de cómic infantil.